Blog de notas sobre Software, Ingeniería y Tecnología
Estas son algunas notas de una Masterclass en la que participé recientemente. En esta reunión, el orador comparte algunos aspectos clave a tener en cuenta cuando un Desarrollador Senior es promovido (o pretende construir un camino hacia un rol de gestión de ingeniería) a un rol gerencial.

Aprender a gestionar el “tiempo” y la “tarea” del nuevo rol. Cuando este cambio se está dando, se te asigna un nuevo título: “Líder de un equipo de tecnología”, lo que implica: “obtener el mejor rendimiento del equipo, orientado a los objetivos principales de la empresa/startup”.
Con todas estas consideraciones e implicaciones, gestionar tu tiempo se vuelve fundamental para el éxito.
Una recomendación para planificar el tiempo es la siguiente:
Adaptar tu agenda diaria anterior/actual implica un cambio en tus responsabilidades y prioridades. Esto significa con más detalle:
Gestión de proyectos: Serás responsable de la planificación del proyecto, la programación y la garantía de que el equipo alcance sus objetivos. “Scrum: The Art of Doing Twice the Work in Half the Time" de Jeff Sutherland es un excelente recurso sobre gestión de proyectos ágiles.
Pensamiento estratégico: Tu agenda debe incluir tiempo para el pensamiento estratégico. Esto podría implicar establecer objetivos a largo plazo, seleccionar tecnología y alinear el trabajo del equipo con los objetivos de la organización. “Good Strategy Bad Strategy" de Richard Rumelt es una lectura obligada para el pensamiento estratégico.
Comunicación: La comunicación eficaz se convierte en una parte fundamental de tu función. Deberás comunicarse con las partes interesadas, los superiores y su equipo. El libro "Crucial Conversations" de Kerry Patterson ofrece información valiosa sobre la comunicación eficaz.
Gestión del tiempo: A medida que asumís más responsabilidades, la gestión eficaz del tiempo es crucial. Es posible que desee leer "Getting Things Done" de David Allen para obtener técnicas prácticas.
Delegación: Debe asignar tareas a los miembros del equipo de acuerdo con sus puntos fuertes y brindarles la autonomía para completarlas. "Drive" de Daniel H. Pink es un gran recurso sobre motivación y delegación.
Resolución de conflictos: Estar preparado para manejar los conflictos dentro de tu equipo. "Crucial Conversations" y "Difficult Conversations" de Douglas Stone, Bruce Patton y Sheila Heen son excelentes referencias para gestionar conflictos.
Aprendizaje y desarrollo de habilidades: El aprendizaje continuo es clave. Asignar tiempo para mantenerse actualizado con las tendencias de la industria y las nuevas tecnologías. Para esto, considerar recursos como cursos en línea en plataformas como Coursera y edX, o servicios de suscripción como Safari Books Online.
Medición y retroalimentación: Implementar métricas y mecanismos de retroalimentación para realizar un seguimiento del progreso del equipo. "Measure What Matters" de John Doerr es un recurso valioso sobre este tema.
Hacer un buen onboarding en tu nuevo rol a medida que realiza la transición a un puesto superior en el campo de la ingeniería de software es clave. Significa tener un proceso estructurado y completo implementado para ayudarte a integrarte sin problemas en tus nuevas responsabilidades. Esto implica:
Introducción a la empresa y la cultura: Debes recibir una introducción detallada a los valores, la misión y la cultura de la empresa. Comprender el espíritu de la empresa es fundamental para alinear tus acciones con sus objetivos. Esta información puede proporcionarse en forma de documentos, presentaciones o reuniones.
Comprensión del nuevo rol: Debe recibir documentación o capacitación clara que describa las responsabilidades, expectativas e indicadores clave de desempeño de su nuevo rol. Esto podría incluir descripciones y objetivos laborales específicos del rol.
Reuniones con las partes interesadas clave: Un proceso de incorporación debe incluir reuniones con las partes interesadas clave, como su gerente directo, pares y subordinados, si corresponde. Estas reuniones brindan información sobre las expectativas y la dinámica dentro de su equipo y ayudan a establecer relaciones laborales.
Capacitación técnica: Si el nuevo rol implica tecnologías o herramientas con las que aún no te has familiarizado, la incorporación debe incluir capacitación técnica o acceso a recursos como cursos en línea, documentación o tutoría. En última instancia, deberás ser pro-activo y autocapacitarte si fuera necesario.
Capacitación sobre procesos y flujos de trabajo: Comprender los procesos, flujos de trabajo y métodos de gestión de proyectos de la empresa es fundamental. Deberás recibir capacitación o documentación sobre cómo se hacen las cosas, incluidas herramientas y metodologías como Agile, Scrum o DevOps. Nuevamente, si esto no fuera posible o no existe, no hay nada mejor que ser proactivo y ser uno mismo quien cree/mapee estos flujos.
Acceso a recursos: Tenes que asegurarte de tener acceso a los recursos necesarios, incluidos software, hardware y permisos de acceso para desempeñar tu función de manera eficaz.
Organigrama: Recibir o armar un organigrama actualizado que muestre la jerarquía del departamento o área y la organización en general, así como la información de contacto de las personas clave.
Establecimiento de expectativas: Tu gerente debe comunicarle claramente sus expectativas con respecto a tu desempeño, la entrega del proyecto y cualquier indicador o meta clave de desempeño. También es importante analizar el cronograma para lograr estas expectativas.
Mecanismos de retroalimentación: Saber cómo y cuándo se realizarán las evaluaciones de desempeño. Comprender los procesos de retroalimentación y revisión de la empresa, incluidas las revisiones de pares o la retroalimentación de 360 grados.
Mentoría y orientación: Si es posible, que se asigne un mentor o compañero que pueda guiarte a través de las fases iniciales de su nuevo rol. Esta persona puede brindar información, responder preguntas y ofrecer apoyo.
Políticas y cumplimiento de la empresa: Revisar y comprenda las políticas y pautas de la empresa, especialmente aquellas relacionadas con el cumplimiento, la seguridad y los estándares éticos.
Desarrollo profesional: Informarte sobre las oportunidades de desarrollo profesional, incluidas capacitaciones, talleres, conferencias o certificaciones o construir tu propio path de desarrollo personal.
Período de prueba (modo de prueba): Si tu nuevo puesto incluye un período de prueba, comprenda su duración, objetivos y criterios de evaluación.
Documentación y recursos: El acceso a un repositorio centralizado de documentación relevante, mejores prácticas y recursos relacionados con tu puesto puede ser extremadamente valioso, sino: CREARLO, se pro-activo. Aplicar la técnica del boy-scout: siempre dejar el lugar de acampe mejor que como lo encontramos.
Rollback: Es una buena práctica analizar la posibilidad de un “rollback” a tu puesto anterior durante tu incorporación. Esta opción debe explorarse en determinadas condiciones, como si la transición al nuevo puesto no es exitosa o si queda claro que el puesto no es el adecuado. Los términos y condiciones de una “rollback” deben definirse claramente durante la incorporación, incluido el plazo dentro del cual se puede ejercer esta opción y los criterios para tomar esta decisión.
Un proceso de incorporación bien estructurado puede facilitar significativamente la transición a su nuevo puesto y preparar el terreno para el éxito. Es importante participar activamente en el proceso de onboarding, hacer preguntas, pedir aclaraciones cuando sea necesario y brindar comentarios para ayudar a mejorar el proceso para los futuros empleados.
Conocer y saludar: Dedica tiempo a conocer a tu equipo, a tus compañeros y a tus subordinados. Establecer relaciones es esencial para un liderazgo eficaz.
Escuchar: Escucha más de lo que hablas. Comprende los desafíos, las preocupaciones y las aspiraciones de los miembros de tu equipo. Mantén reuniones individuales para recopilar información.
Entender los proyectos actuales: Hazte una idea de los proyectos en curso y su estado. Familiarízate con la carga de trabajo y las prioridades actuales del equipo.
Cultura de la empresa: Observa y comprende la cultura y los valores de la empresa. Asegúrate de que tus acciones se alineen con estos principios.
Visión y objetivos: Aclara tu visión para tu equipo y los proyectos bajo tu responsabilidad. Establece objetivos a corto y largo plazo.
Evaluar las habilidades y las carencias: Evalúa las habilidades y la experiencia de los miembros de tu equipo. Identifique las brechas de habilidades que se deben abordar.
Mecanismos de retroalimentación: Establecer mecanismos de retroalimentación para fomentar la comunicación abierta. Hágale saber a su equipo que su aporte es valioso.
Delegue de manera responsable: Delegar tareas y responsabilidades y proporcione expectativas y apoyo claros. Evitar la microgestión.
Conozca los procesos de la empresa: Comprender los procesos, flujos de trabajo y metodologías de gestión de proyectos de la empresa.
Familiarización técnica: Si tu nuevo rol implica nuevas tecnologías, dedique tiempo a familiarizarse con ellas. Esto puede implicar revisar la documentación o buscar capacitación.
Reúnase con las partes interesadas: Programar reuniones con las partes interesadas clave, como su gerente, para analizar las expectativas y los objetivos.
Priorice tu tiempo: Reconozca que tu tiempo es un recurso valioso. Priorizar las tareas y concéntrese en las actividades de alto impacto.
Buscar mentoría: Si está disponible, buscar mentoría de líderes experimentados dentro de la organización o de su red profesional.
Formación de equipos: Considerar actividades de formación de equipos para fomentar la colaboración y la cohesión.
Revisar políticas y cumplimiento: Revisar las políticas de la empresa, especialmente las relacionadas con el cumplimiento, la seguridad y los estándares éticos. Asegúrese de que su equipo conozca y respete estas políticas.
Comunicación: Ser claro y transparente en tu comunicación. Informe a su equipo sobre cualquier cambio o nueva dirección.
Aprender y adaptarse: Estar abierto a aprender de su equipo y a adaptarse al nuevo rol. No dudar en pedir orientación o apoyo.
Gestionar las expectativas: Establecer expectativas realistas para el desempeño de tu equipo y el tuyo propio. Está bien reconocer que habrá una curva de aprendizaje.
Cuidado personal: Asegúrese de cuidarse física y mentalmente. Los primeros días pueden ser exigentes, por lo que es importante mantener un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal.
Ciclo de retroalimentación: Crear un ciclo de retroalimentación para mejorar continuamente tu liderazgo y el desempeño de tu equipo.